Ante la volumetría y el programa cerrado que presentaba el concurso se optó, como opción de proyecto, por buscar un sistema que permitiera dar flexibilidad a las viviendas y oficinas, y potenciar el espacio público y su relación con la plaza de la nueva estación.
Las oficinas y otros usos comerciales se sitúan en las dos primeras plantas y se doblan en la torre más extrema constituyendo una unica pieza a nivel funcional, formal y espacial, al aparecer espacios en cascada que dan continuidad a la secuencia basa-torre. La parte baja, por su parte, funciona en galerías abiertas con oficinas y comercios separados y ordenados por patios.
Las viviendas se sitúan en dos torres separadas de la basa que sirve de jardín elevado y gran espacio público para las viviendas. Estas se organizan en secuencias de patios que iluminan tanto las viviendas como las galerías.
En los bloques de vivienda se ha optado por una distribución de viviendas en corredor. Todas las tipologías se desarrollan según el mismo patrón de módulos con uno o dos patios adosados que garantizan la doble orientación en todas las viviendas.
Se han desarrollado siete tipos de viviendas de entre 50 y 175 m2 útiles que se distribuyen aleatoriamente en planta. Como resultado de esto se ha conseguido un alzado variado modulado según ejes estructurales.
En total se han obtenido 123 viviendas (46 tipo 1, 49 tipo 2, 5 tipo 3, 7 tipo 4, 8 tipo 5, 4 tipo 6 y 4 tipo 7). 61 viviendas en el bloque 1 y 62 viviendas en el bloque 2.
El acceso a vivienda se produce a través de la primera planta situada en la cota de la calle principal. La planta segunda se retranquea del resto del volumen independizando las viviendas del resto del edificio. Esta planta se destina a zonas comunes que se abren a una zona ajardinada en la cota +10.00.